DE TRES CANTOS A MANZANARES POR LA MARMOTA Y COLMENAR VIEJO 4 JUNIO
No tenía planes para éste jueves festivo pero Manu me propone que vayamos a la sierra para ver en qué condiciones de forma está, por llevar 3 semanas de inactividad y por supuesto acepto.
Salimos con el coche a las 7 de la mañana hacia el tanatorio de la Paz, en Tres Cantos, para así enlazar con el carril bici directamente.
Ambiente fresco con un pedaleo inicialmente tranquilo para afrontar una jornada que se presentaría dura y calurosa, con previsión de más de 1000 metros de desnivel en aproximadamente 70 kilómetros.
Desvío a la izquierda para bajar por el arroyo de Tejada,que una vez cruzado -aunque seco en ésta estación del año- aparece ya la primera pendiente -aunque muy corta- para hacernos entrar en calor, después de la continua bajada desde Tres Cantos. El camino es muy intuitivo, siguiendo la tapia del Monte protegido del Pardo en todo momento, que queda siempre a nuestra derecha. De ahí a las vistas de toda la sierra en el alto de Valdelaganar y seguidamente, tras varios sube y bajas, se llega en terreno trialero al puente de la Marmota, ésta vez por otro camino inédito -bordeando la denominada casa del Mochuelo-.
Instantáneas de recuerdo y proseguimos la marcha por la zona de las Mesas, en gran porcentaje de subida y en continuo rompepiernas, por las piedras y la arena presente.
Tras coronar continuamos por el camino de las Saceras, ya en una pista de excelente rodar, aunque en progresiva pendiente.
Después de cruzar la M-618 seguimos por el cordel de Cantalojas hasta llegar a puente nuevo, subida por el camino de la Fuente de las liebres hasta alcanzar el mirador del Chaparral desde dónde divisamos enfrente la inmensa mole granítica de la Pedriza, el embalse de Santillana, el valle de Samburiel y la villa de Manzanares el Real .
Llegada a Manzanares el Real con parada, barrita energética y agua para la posterior hidratación; se prosigue por el mismo camino -ésta vez de subida- cruzando el embalse.
Llegamos al llamado puente del Batán, por debajo de la M-607 y continuamos, ésta vez en bajada constante, por las Dehesas, siguiendo la estela del Manzanares y los caminos del Canal, con terreno unas veces pedregoso y otras arenoso, en sendas de sentido casi único.
De ahí subimos al camino paralelo a la vía del tren, que nos lleva a la estación de Colmenar Viejo; la atravesamos y por nuestra derecha, arrivamos al cementerio municipal y al camino que recorre el arroyo Tejada y que lo cruza en numerosas veces; subida al cordel de Valdeloshielos y finalmente al tanatorio, de nuevo por la vía ciclable.
